Jornada redonda

Sólo la lluvia pudo evitar el ansiado "doblete" de Gran Cordero, y es que los chicos ganaron 10-0 por la mañana (bastante listos los de Caja Redonda, sí señor, van cinco y ninguno lleva ficha) y las chicas estaban a punto de conseguir el triunfo cuando apareció el líquido elemento (8-6 abajo al descanso).

La mañana amaneció gris en la capital de España. Sonaban aún los ecos de la fiesta en casa de Nico en las cabezas de nuestros queridos jugadores. El ruiseñor anunciaba con su canto la llegada de un nuevo día. Los skins de la casa de Carlos dormían apaciblemente y Josete vomitaba sin cesar. En esas estábamos cuando nueve corderiles se presentaron en el Chamartín Fieldhouse en busca de la primera victoria. El rival no era fácil. Son jugadores constantes, peleones, atrevidos y bastante poco listos. Se dejaron las fichas en el coche y eso unido a las pocas ganas de la árbitro de pitar pues provocó la derrota redondil y el consiguiente estreno del casillero de victorias de los lanares. Además, Caja Redonda será sancionado por inasistencia, así que un rival menos para los play-offs. Eso está bien.

El equipo se dividió en dos y junto a las próximas adquisiciones, Feeer y David, echaron una pachanga de las que hacen historia, en la que el autodenominado "Equipo B" demostró al entrenador que tienen calidad sobrada para jugar más minutos. Lástima que el entrenador estuviera pensando en otra cosa. Templeton Fer y Rubén A. Barracus fueron los más destacados. Entre las aficionadas destaquemos la vuelta de María Rey a las canchas y la esforzada madre del lechal, a la sazón presidenta del club, Tere Rey.

Por la tarde fueron las chicas las que tuvieron la oportunidad de no jugar. Al principio la desaprovecharon, así que tuvieron que jugar dos cuartos. Bien asistidas desde el banquillo por Perez de Agustín y sus cinco ayudantes, Gran Cordera demostró una gran fortaleza defensiva y acierto desde el perímetro. Las canastas de la Rodri y de Cristina unidas a los tiros libres de Paloma y Mónica pusieron un interesante 6-6 en el marcador, pero una postrer canasta de la tía esa tochísima de las Iticas (tú no ereh de aquí, cuñaaaaaa) le dio una pequeña ventaja al equipo visitante al descanso (6-8). Esperemos que la próxima semana se remate la faena y, pese a las anunciadas bajas, consigan su primer triunfo. Esperemos,también, que vaya Victoria, lo cual facilitaría muchísimo la tarea.